Masajeador guasha de Shungit
Masajeador Guasha de Shungit Extra
Equilibrio, Protección y Belleza Natural desde Karelia
El masajeador guasha de shungit extra es una herramienta ancestral de belleza y bienestar que proviene de Karelia, Rusia. Tallado en auténtica shungit, este guasha no solo embellece la piel, sino que también aporta energía protectora, equilibrio y limpieza energética profunda. Su uso diario revitaliza el rostro y proporciona una sensación de serenidad y armonía interior.
Propiedades y Beneficios que se le atribuyen
- Drenaje linfático: Estimula la eliminación de toxinas, dejando la piel tersa y luminosa.
- Prevención del envejecimiento: Ayuda a reducir líneas de expresión y mejora la firmeza facial.
- Reducción de hinchazón: Disminuye bolsas y ojeras gracias a su masaje estimulante.
- Relajación muscular: Libera la tensión facial y favorece un descanso reparador.
- Equilibrio energético: La shungit purifica y protege el campo energético, aportando calma y estabilidad emocional.
- Oxigenación y regeneración: Activa la circulación sanguínea y potencia la regeneración celular.
Cómo utilizarlo
- Comienza por el cuello: Desliza el guasha suavemente desde la base hacia arriba.
- Continúa por la barbilla y mejillas: Realiza movimientos ascendentes y firmes.
- Masajea los pómulos y contorno de ojos: Usa movimientos suaves y controlados.
- Finaliza en la frente: Desliza el guasha desde el centro hacia las sienes.
Úsalo por la mañana para reducir la hinchazón o por la noche para potenciar los efectos de tus productos faciales. Guardarlo en la nevera potencia su efecto refrescante y tonificante.
Características del producto
- Tamaño: 8 CM. x 5 cm. aprox.
- Cantidad: 1 unidad.
- El tamaño y el tono pueden variar, ya que son piezas naturales y únicas procedentes de Karelia, Rusia.
Cuidados
Limpia el guasha con un paño suave después de cada uso. Para su limpieza energética, evita la sal y utiliza humo de inciensos naturales como copal, sándalo o palosanto. Guarda la pieza en un lugar limpio y seco para preservar su energía protectora.








